domingo, 24 de abril de 2011

La piedra que está a la izquierda de mi pecho se está empezando a reblandecer. Puedo notar lo que vosotros, los humanos, llamáis sentimientos.
No, ahora en serio, me evalúo diariamente lo que pienso, quiero ser totalmente racionalista, y auto-crítico conmigo mismo, y eso me ha llevado a la conclusión de que me cuesta sentir las cosas, o por lo menos, expresarlas. Una enfermedad grave de un familiar muy querido(Ya recuperado, "El cáncer es una enfermedad que se cura" Dijo Espe, pues a mi hermana no se lo curaron, se lo extirparon de dentro de su cuerpo), me duele muy poco la frialdad de mis padres, y me cuesta mucho el no insultar a la gente, pero lo consigo. Entre muchas más cosas (qué no voy a contar porque son privadas y personales).
Pero, este corazón de piedra se está empezando a ablandar. Pero solo en un lado, a veces (Pensandolo prácticamente), el lado más tonto, el del AMOR (Amor, amor, amor...) Pero este último mes estoy empezando a sentir ese lado, noto como los impulsos nerviosos, llegan a mi cerebro desde esa zona. Y sé que se abrirá del todo. Noto como es la zona justo del buen amor, ese amor que haces que te preocupes por el bien-estar de esa persona, que te hace ver no solo lo bueno, sino también lo malo; eres consciente de esa parte mala, y sabes que en una balanza no llega a elevarse de la base.
Sí amigos, sí. Me estoy enamorando. Me estoy enamorando de una forma correspondida.
Odio este tipo de fotos, porque es la típica foto que se pone en blogger.
Y ¿Porqué no decirlo? es una mariconada.
Pero dedico esta entrada y la foto a mi maricón favorito.

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